Ricardo Basáez

Andrea Castillo es profesora y divulgadora científica en Andacollo, Región de Coquimbo. Su acercamiento a la ciencia se remonta hace más de 15 años cuando asistió a una formación de guías astronómicos para el desarrollo turístico en el observatorio Collawara. 

Se dedicó al astroturismo como guía y ofreciendo servicios de observación móvil con su microempresa “Quyllur”, en la cual cuenta con 5 telescopios de gran alcance.

Pero su mayor pasión es enseñar astronomía a los niños. Es así como ha realizado talleres en escuelas públicas y también creó La Brigada de Protección de los cielos en Andacollo. Allí, junto a niños y niñas de la Escuela Patricio Lynch,  promueve la descontaminación  lumínica advirtiendo  sus impactos en el medio ambiente.

Este grupo es integrado por alumnos de 5° a 8° básico y entregan información tanto a la comunidad de Andacollo como a otras ciudades para enseñar a iluminar correctamente para que no afecte la observación del cielo y sus astros, principalmente de la II a la IV región por la gran cantidad de Observatorios que hay en estas zonas.

“Me la he jugado por crear niños conscientes y por cuidar los cielos de la región de Coquimbo y potenciar los cielos de mi comuna, Andacollo. Con que un estudiante quiera seguir el camino de la ciencia, me siento pagada”,  asegura Andrea. 

Por su labor y compromiso, Andrea Castillo ha recibido varios reconocimientos tanto a nivel nacional como  internacional. En 2020 recibió el premio Night Sky Defenders,  entregado por International Dark-sky Association, iniciativa global que combate la contaminación lumínica. 

Además, en 2020 fue elegida como una de los  14 “Camiseteados por Chile”, iniciativa que busca visibilizar y premiar a personas comunes que llevan a cabo tareas extraordinarias y que se las juegan por sus comunidades y por las causas que los mueven.